InicioActualidad¿Criptomonedas como medio de pago? El Banco Central de Australia dice que...

¿Criptomonedas como medio de pago? El Banco Central de Australia dice que no

Las criptomonedas parecen no estar pasando por su mejor momento en Australia.

El Banco Central de ese país publicó recientemente un estudio que evidencia la poquísima aceptación que tienen las criptomonedas como medio de pago en la región.

La investigación, realizada en octubre del año pasado y cuyos resultados salieron a la luz el 19 de este mes, muestra el meteórico crecimiento de los pagos digitales como forma preferida de los australianos para realizar sus consumos.

Para averiguar cuales son los métodos mas utilizados a la hora de pagar, el Banco de la Reserva de Australia (RBA) reclutó a 1.100 personas, entre ciudadanos y residentes. A todos se les solicitó llevar un registro de sus compras en los meses de octubre y noviembre de 2019, y de la manera en que realizaron el pago de las mismas.

Con los hallazgos, el RBA elaboró un reporte al que denominó “Comportamiento de Pago de los Consumidores Australianos”, documento que el banco hizo del conocimiento general hace aproximadamente dos semanas.

Publicidad

Los datos recogidos por el RBA indican que los australianos están empleando con mucha mayor frecuencia los medios de pago digitales, relegando el uso de efectivo a un muy segundo plano. Las formas de pago “sin contacto” parecen ser las de crecimiento más acusado.

Con respecto a 2016, los pagos móviles sin contacto casi se quintuplicaron entre las personas más jóvenes (16-29 años), y se triplicaron entre el grupo etario siguiente (30-39 años). El único segmento que mostró un leve decrecimiento fue el de 50-64 años. Interesantemente, las personas mayores de 65 registraron un incremento cercano al doble en su preferencia por este tipo de pagos.

Contrariamente a lo que se pudiera pensar, el uso del efectivo todavía goza de un relevante porcentaje de usuarios. Según el estudio del RBA, la cantidad de australianos que prefirieron el dinero en efectivo por encima de los medios digitales alcanzó un cuarto de sus entrevistados.

Las razones más populares para el uso de efectivo fueron la aceptación de los establecimientos, ya que es la forma de pago comúnmente aceptada, y la facilidad para llevar el control de los gastos que proporciona saber al momento cuánto dinero se lleva en la cartera.

Menor importancia se le dio a las comisiones por transacción que aplican los pagos digitales, y, para sorpresa de muchos, la privacidad de las operaciones tampoco fue considerada de peso a la hora de preferir efectivo.

Posiblemente, tanto en Australia como en el resto del mundo, el uso del efectivo sufra un declive significativo debido la crisis sanitaria desatada por el virus covid-19, pues los billetes y monedas podrían ser vistos como un vector de propagación.

Como puede observarse en el cuadro, el empleo de efectivo ha venido decayendo en Australia desde el 2007 (69% de los pagos) hasta aproximadamente un tercio de ese volumen en 2019 (27%). El fenómeno inverso puede apreciarse en el uso de las tarjetas de débito y crédito, que para el año pasado fue del 63%, casi tres veces más que el uso registrado en 2007.

Otros métodos de pago, como PayPal o BPAY han mantenido un modesto porcentaje en la preferencia de los usuarios, porción similar a la que tienen las tarjetas de regalo, tarjetas prepagadas y otros medios.

El reporte Comportamiento de Pago de los Consumidores Australianos también tomó en cuenta el empleo de las criptomonedas por parte de los australianos a la hora de pagar por sus compras.

A pesar de que las criptomonedas se han dado a conocer más como un medio de inversión que como un sistema de pago, una porción muy limitada de los consumidores que han entrado en contacto con ellas por primera vez las han empleado para adquirir bienes o servicios.

Publicidad

Según el informe del RBA, la cantidad de entrevistados que dijeron poseer algún conocimiento acerca de las criptomonedas se ubicó en el 82%, aproximadamente. De ese porcentaje, menos del 1% confesó haber utilizado criptomonedas para pagar consumos durante el año pasado.

La causa del poquísimo uso de criptomonedas como medio de pago puede ser explicado fácilmente por dos factores. El primero de ellos es la volatilidad de estos activos digitales. Nada más hay que recordar el reciente desplome en el precio de Bitcoin, que echó por tierra a todos los maravillosos pronósticos que se tenían para la moneda en 2020.

La segunda razón puede deberse a la cantidad de medios de pago digitales alternativos disponibles para los consumidores. Las criptomonedas pueden ofrecer propiedades de privacidad (Monero, Dash), resistencia a la censura por ser descentralizadas, y costos de transacción prácticamente inexistentes en algunos casos.

Sin embargo, hay que reconocer que, en cuanto a la usabilidad como medio de pago, todavía hay trabajo por hacer. Mucha gente puede sentirse intimidada sólo por conocer las maneras en que debe guardar sus criptomonedas (billeteras de hardware, de escritorio) y también atemorizada por ser un blanco potencial de los piratas informáticos.

Los medios móviles de pago ya establecidos, como Apple Pay, Google Pay y otros llevan una ventaja enorme a las criptomonedas por su facilidad de uso y su amplísima base de usuarios.

Por otro lado también nos topamos con el tema de los impuestos. En Australia, cada transacción donde se encuentren involucradas criptomonedas queda sujeta al pago de cargos impositivos.

Si lo sumamos todo, no tiene mucho sentido para nadie poseer una moneda que de un momento a otro puede perder gran parte de su valor, que es no es completamente fácil de utilizar y por la que también se debe pagar al fisco.

En vista del tremendo impacto financiero que tendrá la pandemia desatada por el covid-19, algunos analistas piensan que las criptomonedas recibirán el flujo de capitales provenientes de las tambaleantes bolsas mundiales, llevando ello a la revalorización de su precio y a la promoción de su adopción.

Publicidad

Mientras tanto, los australianos se muestran cautelosos, y aunque dejan de usar efectivo cada vez más, tampoco significa que vayan a recibir a las criptomonedas con los brazos abiertos. ¿Criptomonedas? No, gracias. La tierra de los canguros y koalas parece no tener prisa en montarse en el tren de las criptos.

Abelardo Madrid
Abelardo Madrid
Administrador de redes y sistemas.
- Publicidad -spot_imgspot_imgspot_imgspot_img

Populares

- Publicidad -spot_imgspot_imgspot_imgspot_img