La nueva fase de IOTA 1.5 se está acercando con novedades que no dejarán indiferentes a los usuarios del protocolo. Este es un paso más para llegar a IOTA 2.0. también conocido como Coordicide.
El estado actual de la red IOTA es conocido como Chrysalis, o IOTA 1.5, durante este período hemos podido notar grandes avances para el protocolo y ahora ya queda poco para que pase a la segunda parte de esta fase. IOTA 1.5 es el antecedente de IOTA 2.0, o Coordicide, donde se disfrutará de nuevas ventajas y facilidades para hacer la red más escalable y descentralizada.
Las fases de IOTA 1.5
Antes de pasar a la versión 2.0 del protocolo, IOTA aún tiene mucho que ofrecer en su versión actual.
Actualmente la red se encuentra en la primera fase de su versión 1.5, donde se han ido desarrollando nuevos productos y servicios. Esta fase entró en funcionamiento a finales de agosto de este año tras un despliegue de pruebas y validaciones.
Esta fase trajo consigo algunas de las actualizaciones más importantes para el protocolo como la implementación de hasta 1.000 operaciones por segundo. El tiempo promedio de confirmación también se redujo a unos 10 segundos, esto supuso un gran avance desde las 20 operaciones por segundo que podía confirmar la red antes de Chrysalis.
La introducción de esta actualización se pensó de para dar un paso más adelante hacía la aceptación empresarial de IOTA. Con el notorio aumento de la velocidad de la red, esta se encuentra preparada para desempeñar un papel satisfactorio en muchos más casos de uso.
IOTA 1.5 fase 2
El desarrollo de la red IOTA no pretende quedarse estancado en su estado actual hasta la implementación de la red 2.0. Antes de llegar a la versión Coordicide, se ha planeado la implementación de la segunda fase de la versión 1.5.
La llegada de esta fase 2 se había previsto para el segundo semestre de este año, pero todo apuntas que finalmente se retrasará hasta principios de 2021. Este retraso puede deberse a la situación crítica creada por el Covid-19 que está causando retrasos y problemas en el momento del desarrollo.
Según Jakub Cech, director técnico de la Fundación IOTA, los desarrolladores están probando las funcionalidades de la nueva fase en un entorno privado de pruebas. En la menor brevedad posible, esta red de prueba se hará pública para comenzar las pruebas reales con usuarios.
IOTA 1.5 fase 2 traerá consigo varias actualizaciones a la red como la introducción de la funcionalidad de salida de transacciones no gastadas (UTXO) y funciones como: implementación de direcciones reutilizables, transacciones atómicas programadas y la transición a una diseño de transacciones binarias. Sin embargo, el plato fuerte de la fase 2 es la integración de una nueva billetera.
Actualmente, y desde su comienzo, IOTA ha contado con la billetera conocida como Trinity. Esta billetera ha desempeñado una buena función a lo largo del tiempo estableciendo un estándar dentro de la industria Distributed Ledger Technology (DLT). Trinity ha protegido las operaciones con riguridad a la par que ofrece una experiencia de usuario simple y intuitiva. Sin embargo, los desarrolladores han decidido que esta cartera se quedará en la versión 1 del protocolo.
Para sustituir a Trinity se está trabajando en Firefly, la cual verá la luz muy pronto tras su presentación la semana pasada. Esta nueva cartera se ha pensado con el objetivo de ofrecer nuevos productos a los usuarios sin perder la usabilidad. Algunas de las nuevas funciones con las que contará Fireflye son: nuevos activos tokenizados, administración y creación de contratos inteligentes y alguna función para mejorar la experiencia del usuario como un apartado de ayuda y chat.
Es posible que no todas las funciones de la billetera sean accesibles desde su lanzamiento, pero los desarrolladores han pensado en Firefly de cara al futuro. Esta primera versión de la cartera de la que se habla en la presentación se ha enfocado en mejorar la seguridad y la experiencia de usuario central.
Reacción del mercado ente IOTA
El protocolo IOTA cuenta con un token nativo del mismo que se conoce como MIOTA. El activo de la red se utiliza para firmar compras y pagar tasas dentro de la plataforma, la actualización a la fase 2 de Chrysalis apunta a marcar un despuente del precio del activo.
Actualmente, MIOTA se está comerciando a unos 0,334 dólares por token con una capitalización cercana a los 933 millones de dólares. Este precio está lejano a su máximo de 5,25 dólares en diciembre del 2017, sin embargo, esta cantidad no es significativa debido a la burbuja que existía en ese momento.
Aún que el precio de MIOTA se encuentre muy por debajo de su máximo, muchos especuladores piensan que el futuro podría ser positivo para el activo. El abrirse hacia un enfoque más empresaria de la red podría ayudar a que el activo viese un periodo de bonanza por el interés de las compañías.
La lógica es la siguiente, las facilidades y velocidad de la red hará que las compañías quieran adquirir información en IoT. Esta operación requiere de MIOTA para realizarse lo que hará que las grandes empresas con vistas a obtener más ganancias con costra reducidos adquieran el token en grandes cantidades. Dentro de este grupo de compañías destacan las enfocadas al sector médico y de seguros.
Seguir leyendo acerca de la predicción precio futuro de IOTA para el 2020 y el 2021, es posible que te parezca interesante.
