El reciente lanzamiento del protocolo de comunicación inter-blockchain de Cosmos Hub significa que el ecosistema de las cadenas de bloques está un paso más cerca de su unificación. En los primeros días de Bitcoin y Ethereum, muchos anticiparon un resultado del tipo “el ganador se lo lleva todo”, en donde una sola blockchain, eventualmente, actuaría como la plataforma de acceso para todas las transacciones y aplicaciones descentralizadas.
Pero a medida que la industria seguía adelante, este concepto se hizo menos factible. Sin la ocurrencia de bifurcaciones y la consiguiente creación de nuevas cadenas, la experimentación demostró tocar con rapidez sus límites y pronto surgieron cientos de cadenas de bloques, cada una de las cuales afirma que se adaptan a un propósito específico dentro del amplio ecosistema de cadenas.
Cadenas de bloques que hablan entre sí
En el sector empresarial tradicional, el tema de los datos aislados y su impacto negativo en la eficiencia del proceso ha sido un punto álgido durante décadas, y lo sigue siendo. Literalmente se han gastado miles de millones tratando de crear diferentes bases de datos capaces de comunicarse sin fricciones entre sí, con diferentes grados de éxito.
No es sorprendente entonces, que el mismo problema de integración haya asomado su cara nuevamente en la economía de la cadena de bloques, donde la tarea de conectar cadenas aisladas y permitirles escalar de manera efectiva ha demostrado ser un desafío importante.
Cosmos Hub, que comenzó a funcionar la semana pasada, es una solución potencial, que actúa como una cadena de bloques coordinadora que forma un puente entre diferentes cadenas, permitiendo que cada una detecte el estado de la otra e intercambie activos sin confianza entre las redes.
Un nuevo campo de juegos para los desarrolladores
Además de permitir que las cadenas de bloques existentes se conecten, Cosmos proporciona una red de cadenas de bloques públicas con las que los desarrolladores pueden interactuar, todas construidas con el mismo motor de Tendermint. Cada blockchain individual (llamada “Zona” en la terminología de Cosmos) está construida en el mismo protocolo estándar, y se puede conectar sin problemas a la blockchain de puenteo, conocida como Hub.
Jae Kwon, CEO de Tendermint, dice: «La tecnología Blockchain es una innovación increíble que, desafortunadamente, ha estado padeciendo de una serie de limitaciones que incluyen problemas de escalabilidad, falta de facilidad de uso e innumerables aspectos de gobernabilidad y medio ambiente. La visión de Cosmos es superar estas limitaciones y superar las barreras hacia a la innovación, para crear finalmente una Internet de blockchains – una red descentralizada de cadenas independientes, escalables e interoperables«.
Atomic Swaps y Cosmos
Hasta cierto punto, las promesas de Cosmos ya han sido cumplidas por otras iniciativas de comunicación entre cadenas de bloques. Proyectos basados en Atomic Swaps (intercambios atómicos), como 0x y Kyber Network, ya permiten blockchains con características similares donde el intercambio de archivos ocurre gracias a una red de capa dos. Sin embargo, la solución de Atomic Swaps está limitada en el número de blockchains entre los cuales pueden ocurrir intercambios.
En la visión macro, esta limitación de interoperabilidad es lo que Cosmos busca resolver, al proporcionar una red principal para todo el ecosistema donde se puede compartir el valor, no sólo entre dos blockchains similares, sino potencialmente entre cualquiera de las cadenas que se puedan conectar al Hub. Sin embargo, Cosmos actualmente está limitado a blockchains que comparten un mecanismo de liquidación de «rápida resolución», que incluye blockchains de Prueba de Participación (PoS) como Dash y NEO.
Las cadenas de finalidad probabilística, como Bitcoin y Ethereum, también pueden conectarse a Cosmos, pero, para que esto funcione, es necesaria una “Zona de clavija” adicional (otra cadena intermedia) que haga las veces de adaptador. Eventualmente, se espera que estas zonas estén configuradas para adaptarse a muchos tipos diferentes de blockchains.
Una competencia que apenas comienza
En los tres años que Cosmos ha estado en desarrollo, la interoperabilidad de blockchain ha venido cobrando mayor importancia, y recientemente fue citada por el Foro Blockchain de la Unión Europea como uno de los principales obstáculos que impiden su progreso. Como tal, una serie de proyectos de alto perfil ahora están luchando para convertirse en la «cadena de bloques de blockchains», y servir de tejido conectivo universal para la comunicación entre cadenas.
AION, ICON y Wanchain, que juntos forman la Alianza de Interoperabilidad de Blockchain, están trabajando en sus propias redes de cadenas de bloques multinivel que involucran cierto grado de interoperabilidad.
ICON, el proyecto de cadenas de bloques más importante de Corea del Sur, se basa en Loopchain, un motor de blockchain que es el equivalente de Tendermint, y actúa como una cadena intermedia que conecta un ecosistema de blockchains conocido como la República ICON.
AION y Wanchain tienen proyectos similares, y junto a Cosmos, Polkadot de Parity se ha convertido en otro competidor destacado. Desarrollado por el cofundador de Ethereum, Gavin Wood, Polkadot es otro protocolo de interoperabilidad de blockchain que se implementó en mayo de 2018, y está programado para lanzar su red oficial en el tercer trimestre de este año.
Siendo el primero es despegar, Cosmos tiene una ventaja significativa, y ya ha logrado asegurar varias asociaciones prestigiosas. El gigante de las plataformas de criptomonedas Binance ya ha construido su DEX sobre bifurcaciones de Tendermint y Cosmos; la plataforma de juegos blockchain Loom ha anunciado que su PlasmaChain será compatible con Cosmos, y el servicio de transmisión de redes sociales Playlist, que cuenta con más de 400.000 descargas en iOS, planea usar Cosmos para desarrollar una economía de tokens.