SEC, la Comisión de Bolsa y Valores de los Estados Unidos, sigue vigilante en su labor de proteger a los inversores y consumidores noerteamericanos.
El jueves 27, el organismo publicó un documento donde admite haber acusado al actor de películas de acción Steven Seagal, bajo cargos de ocultamiento de ingresos provenientes de su participación en la promoción de una ICO, u Oferta Inicial de Monedas.
Las ICO se convirtieron en la manera preferida para la recolección de fondos de las startups de blockchain y criptomonedas, sobre todo después de que el precio de Bitcoin se disparara por encima de los $19.000 en diciembre de 2017.
Seagal, alega la SEC, se involucró en la promoción de una Oferta Inicial de Monedas a favor de la compañía Bitcoiin2Gen, actividad por la cual recibiría un cheque por la cantidad de $250.000 y otro pago denominado en tokens de Bitcoiin2Gen (B2G) con valor de 750.000 dólares.
El actor de innumerables películas de acción, como “Difícil de Matar” (1990), “Alerta Máxima” (1991) y “Nico” (“Above the Law” – 1988), acordó con la startup de criptomonedas recomendarla usando las cuentas de sus redes sociales.
Seagal, ahora de 67 años, se comprometió a servir como atractivo publicitario de la ICO señalada, sugiriendo a sus seguidores “encarecidamente” invertir en ella. El también maestro de las artes marciales conocidas como Aikido, prestó además su nombre para un comunicado de prensa donde se adjudicaba el titulo de “Embajador de la Marca Bitcoiin2Gen”.
Las leyes federales de valores en los Estados Unidos obligan a cualquier persona, independientemente de su profesión, a revelar si recibe o no retribución de algún tipo por favorecer la compra de monedas virtuales o tokens considerados como bienes de inversión.
Un reporte que la SEC emitió en 2017 acerca de The DAO (organización autónoma descentralizada) refleja que algunas de las monedas participantes en ofertas iniciales pueden caer en la clasificación de activos de inversión o valores.
En estos casos, quien incurra en la promoción de tales activos queda sujeto a la provisión descrita en la ley federal correspondiente. La ley exige que el ejecutor de la promoción revele el monto, naturaleza y alcance de la retribución, si la misma hubiese tenido lugar.
La recientemente nombrada directora de la Unidad Cibernética de la SEC, Kristina Littman, defendió el derecho de los potenciales inversores a determinar si la opinión de Seagal estuvo parcializada al momento de recomendar la ICO, para lo cual se hace necesario conocer si recibió o no compensación por ello.
Esta Unidad Cibernética esta adscrita a la División de Cumplimiento de la SEC. Está encargada de vigilar los mercados y brindar protección a los inversores frente a las amenazas de carácter electrónico o digital.
Littman está a cargo de la Unidad Cibernética desde mediados del año pasado, cuando su antecesor, el señor Robert Cohen, dejó el puesto en agosto. La funcionaria lleva una carrera de casi 20 años en la Comisión, lugar donde ha desempeñado varios cargos importantes.
La directora agregó que la ley no exime a nadie de declarar beneficios por promoción de valores, menos a celebridades, que son personas cuya influencia en el resto de la gente es, generalmente, considerable.
Aunque obró quizá por desconocimiento, la SEC considera que Steven Seagal incumplió las disposiciones legales vigentes que regulan estos casos específicos. El actor consintió en renunciar a su pago de $157.000, que entregará a la Comisión, además de cubrir una multa por un monto similar.
En total, Seagal tendrá que desembolsar unos 350.000 dólares, si se incluyen otros cargos y gastos accesorios por antejuicio. Complementariamente, durante un período de tres años, tampoco podrá ofrecerse para promocionar ningún tipo de activo de inversión, incluyendo los de naturaleza digital.
Además de la Unidad Cibernética, la SEC posee otra sección para ayudar a los consumidores a prevenir el fraude: la Oficina de Defensa y Educación del Inversor. Allí se le advierte a las personas tener cuidado con las recomendaciones de productos financieros, especialmente cuando las hace alguna celebridad.
En los Estados Unidos es habitual que las marcas de renombre y las agencias de publicidad contraten a personalidades del espectáculo, o de los deportes, para aparecer en campañas de mercadeo por todo el país. La SEC insiste, sin embargo, en que los interesados en alguna inversión investiguen a fondo antes de comprometer su dinero.
Desde el 2017, la vida de Steven Seagal se ha viso envuelta en el escandalo, debido a varias acusaciones de conducta inapropiada y acoso sexual que pesan sobre él. Ese año se hicieron notorios los alegatos de Juliana Margulies, Jenny McCarthy y Portia de Rossi, la actual pareja de Ellen DeGeneres, donde aseguran que Seagal las sometió a situaciones indebidas de esa índole cuando apenas comenzaban en sus carreras.
La lista de mujeres que le señala por las mismas razones es más extensa. Eva la Rue, de CSI:Miami también le denunció en 2017. Lo ocurrido a McCarthy, según ella, data desde 1995. Margulies, por otro lado, contaba solo con 23 años cuando pasó por su desagradable encuentro privado con Seagal.
Otras celebridades que la SEC no dejó escapar fueron el campeón de boxeo Floyd Mayweather y el productor musical DJ Khaled. La Comisión acuso a ambos en el año 2018 de promocionar ofertas iniciales de monedas sin declarar los pagos que recibían por la actividad.
Para ese entonces, el arreglo con la SEC le costaría unos 600.000 dólares a Mayweather, mientras que DJ Khaled salió librado del asunto por un poco más de $150.000.