Yen digital es un termino que se viene escuchando con mayor frecuencia en los círculos financieros del gobierno japonés. Siendo el primer país del mundo en aceptar abiertamente a Bitcoin y otras criptomonedas como medio de pago, no es extraño que esto suceda.
Aquello sucedió gracias a la Ley de Moneda Virtual promulgada en marzo de 2017. En ese entonces, la noticia tuvo bastante repercusión en los medio especializados, donde se dijo equivocadamente, que el gobierno japonés había otorgado a Bitcoin rango de moneda legal.
Para tratar de ordenar las cosas, la Agencia de Servicios Financieros de Japón, FSA, tuvo que considerar la creación de una nueva categoría legal de activos, los cripto activos. En diciembre de 2018, un comité de la FSA presentó un documento donde se sugería abandonar el término “moneda virtual”, a fin de acabar con la confusión.
Japón, siempre a la vanguardia
Es en Japón donde suelen incubarse los adelantos tecnológicos de última generación, al menos en lo que se refiere a ciertos tipos de artefactos o equipos electrónicos. Con respecto a las criptomonedas, ciertamente no lideran el ecosistema en cuento a ICOs o proyectos blockchain. Tampoco deja de ser verdad que los japoneses han sido desde el principio amigables con el uso de las mismas.
Inclusive, están en marcha interesantes experimentos con el fin de implementar alguna versión local de criptomoneda en ciertas áreas del país. Un ejemplo lo tenemos en la región Ise-Shima de la prefectura Mie. Allí, los japoneses acuden a disfrutar del ambiente costeño, las excelente comida marina y los paisajes del parque nacional.
En dicha zona, y a finales de este año, el Instituto de Investigaciones de Mitsubishi y la compañía Kintetsu Railway ejecutaran el piloto de un sistema de pago, basado en un token desarrollado entre las dos entidades, denominado Kintetsu Coin.
La presión actual es por agilizar la emisión de una moneda digital de banco central, o CBDC. A raíz de la controversia que supuso tan sólo la propuesta de Libra, varios bancos centrales del mundo han comenzado a meter vapor a investigaciones propias o proyectos pilotos con el mismo fin.
Febrero, fecha tope del yen digital
Para diagnosticar el impacto que tuvo Facebook al anunciar su Proyecto Libra, nada más hay que tomar en cuenta la prisa con que se están moviendo los reguladores en Japón. Para fines de este mismo mes, se espera la introducción de un documento preliminar ante el parlamento, donde se esbocen algunos de los detalles concernientes al nacimiento del yen digital.
Otro de los catalizadores del yen digital parece hacer sido la insistente especie sobre la emisión de la CBDC de China, el renminbi o yuan digital, y no es para menos. Los usuarios activos por mes de Facebook se estimaron en 2.5 mil millones en el último trimestre de 2019.
Eso supera ampliamente a la población estimada de China para el mismo período: 1.400 millones de personas. De implementarse tanto el yen digital como su contraparte china, el panorama de la economía global pudiera dar un giro no deseado por los actuales intermediarios monetarios.
El advenimiento de Libra y el renminbi digital ya están siendo estigmatizados por quienes llevan las riendas de la economía en el planeta, haciéndolos parecer como agentes potencialmente desestabilizadores de gobiernos y sistemas financieros.
En palabras del Ministro de Finanzas, Taro Aso, la emisión de una moneda digital oficial por parte de China significaría un desafío tremendo para el país nipón. La opinión de Aso es complementada por la advertencia de Norihiro Nakayama, Viceministro de Relaciones Exteriores, quien propone la creación del yen digital como medida inmediata ante el avance del proyecto CBDC chino.
Hay que atajar a Libra
El gobierno japonés no es el único en adelantar la creación de una moneda digital nacional, en este caso el yen digital. Recientemente, el banco central de esa nación participó en un grupo de trabajo liderado por el Banco de Pagos Internacionales (BIS), donde, entre otros, estuvieron representantes de los bancos centrales de la Unión Europea, Suiza y Canadá.
Uno de los ejecutivos del banco central japonés, Hiromi Yamaoka, dijo que, aparte de compartir información sobre las monedas digitales de bancos centrales, uno de los propósitos de este tipo de reuniones era el de mantener un monitoreo cercano y permanente de iniciativas como Libra.
Con el fin de que la implementación del yen digital se haga de la forma menos disruptiva posible, los legisladores japoneses están considerando un modelo donde la moneda sea creada y emitida por compañías ligadas al sector privado, mientras que el banco central actuaría como supervisor de su funcionamiento.