La minería de criptos sigue siendo una actividad que rinde sus beneficios. Y si no, que lo digan los habitantes de regiones donde el ingreso por persona es bajo.
En algunos de esos sitios, la población cuenta con la suerte de tener acceso a dos elementos que son vitales para esta labor. Uno de ellos es la energía eléctrica de bajo costo; el otro, es una conexión a Internet.
Pero es precisamente el aprovechamiento de electricidad barata lo que hace verdaderamente atractivo llevar a cabo una operación de extracción de criptomonedas.
Para dichas familias, contar con un equipo con el que dedicarse a la minería de criptos significa un alivio financiero.
Las economías de los lugares donde viven suelen estar afectadas por anomalías como la devaluación, inestabilidad política, o la falta de puestos de empleo.
Tal es el caso de los residentes de Abjasia, Georgia. Al desintegrarse la Unión Soviética, el estado de Georgia declaró su independencia. Luego, la región de Abjasia hizo algo similar.
Minería de criptos, tabla de salvación
Tras una larga y extenuante guerra, Abjasia logró separarse de Georgia y reclamar su definición como nación soberana.
Actualmente, Abjasia sólo ha obtenido tal reconocimiento por parte de pocos países. Siria, Nicaragua y Rusia están entre ellos.
La economía local se basa mayoritariamente en labores agrícolas. Además, la industria del turismo ha encontrado una veta importante allí, donde explota la casi virgen belleza de sus impresionantes paisajes.
Pero los habitantes de Abjasia viven tiempos difíciles. Los empleos escasean, y la guerra con Georgia dejó secuelas económicas sumamente negativas.
A manera de sobrevivencia, los residentes más familiarizados con la tecnología se han dedicado a la minería de criptos para complementar sus ingresos. A veces, lo obtenido mediante los equipos de extracción es lo único con lo que pueden contar como salario.
Apagones en la capital
Ha sido tanto el impacto de la actividad minera, que la capital, Sujumi, sufre de cortes de energía varias veces al día. Por otra parte, los tendidos eléctricos datan desde cuando Georgia pertenecía todavía a la antigua URSS.
Eso causa que la electricidad generada no llegue adecuadamente a los habitantes. Y las granjas de minería de criptos acaparan gran parte de la que logra atravesar las líneas de transmisión.
Para atacar el problema de los apagones, el Parlamento abjasio había decretado una veda de la actividad minera hasta mayo de este año. Pero la minería de criptos ha seguido creciendo de manera ilegal, y los cortes de energía se siguen sucediendo.
En vista de la situación, el gobierno de Abjasia ha emitido una nueva resolución. Con la misma extiende la prohibición, tanto de la minería de criptos como la importación de equipos relacionados con dicha actividad, hasta mayo del 2022.
En marzo, el periódico ruso “La Gaceta de Novaya” reportó que en Abjasia “el que no está minando criptomonedas, conoce a algún vecino que sí lo está haciendo”.
Un político local, Tengiz Jopua, explica que la gente lo está pasando mal. “La industria que últimamente proveía empleos e ingresos decentes, el turismo, ha sido fuertemente afectada por la pandemia”, dice.
“Mucha gente se ha quedado sin empleo. Algunos venden lo que tienen, un animal de corral, un auto viejo. Con eso compran una minadora y se las arreglan mientras tanto”, agrega Jopua.
Prohibición, legalización, prohibición
La minería de criptos había estado prohibida desde el año 2018 en Abjasia, hasta que en el 2020 un partido distinto gano las elecciones. Entonces, la nueva mayoría parlamentaria suspendió la prohibición, declarando de nuevo la operación de mineros como una actividad legal.
Pero el grueso de la minería de criptos en Abjasia no va a parar a los bolsillos del habitante promedio. Los abjasianos apenas pueden tienen los recursos para comprar equipos de segunda mano.
Los que se llevan las mayores ganancias de la extracción son empresarios locales, asociados con rusos que vienen a poner granjas clandestinas. Según Sigmapool, en algún momento estuvieron funcionando miles de máquinas de extracción en Abjasia.
Las leyes vigentes respecto a la minería de criptos son severas. Las autoridades establecen penas que van entre uno y tres años de cárcel para quienes se conecten a la red eléctrica del país con fines de operar equipos de extracción.
