Los abogados de Elon Musk han pedido la desestimación de una denuncia de 258.000 millones de dólares por promocionar Dogecoin (DOGE). Los demandantes estarían colocando a Musk como uno de los principales dirigentes de un esquema piramidal detrás del activo.
El pasado mes de junio, Elon Musk fue el objetivo de una demanda colectiva impulsada por los accionistas que apostaron por Dogecoin (DOGE). Según la demanda, Musk regía un esquema piramidal para respaldar el valor y crecimiento de la criptomoneda, y de esta forma utilizar su influencia en su propio beneficio.
La demanda coloca a Musk como uno de los principales promotores del activo, publicándolo deliberadamente en diferentes tanto en su Twitter como en diferentes actos públicos como entrevistas o exposiciones. Los inversores estarían acusando a Musk de hacer subir el valor de DOGE un 36.000% en 2 años para luego dejar que colapsase deliberadamente.
El crecimiento del activo habría generado miles de millones de dólares en ganancias para Musk y sus socios, a expensas del resto de inversores, los cuales tendrían perdidas millonarias tras el colapso. La demanda también acusa a Musk de promocionar un activo que deliberadamente sabía que no contaba con valor intrínseco.
Por estos motivos, los demandantes reclaman a Musk un total de 258.000 millones de dólares en indemnización. Esta cifra es el triple de la disminución estimada en el valor de mercado de Dogecoin en los 13 meses anteriores a la publicación de la demanda.
Elon Musk responde a la demanda
De forma sorprendente y tras 9 meses desde la presentación de la demanda de los accionistas, Elon Musk han decidido responder la acusación. El pasado 31 de marzo, los abogados de Musk pidieron la desestimación de la demanda ante el tribunal federal de Manhattan. En representación de Musk, sus propios abogados tacharon la demanda como una «fantasiosa obra de ficción» en relación con lo «tuits inocuos» publicados por Musk sobre el activo.
La respuesta destaca alguno de los tuits más relevantes de Musk sobre Dogecoin como son: «Dogecoin Rulz» o «sin altibajos, solo Doge». Para la defensa este tipo de comentarios son demasiado poco relevantes como para respaldar firmemente un intento de fraude. Por otro lado, los abogados de Musk destacan que la demanda nunca explica como su cliente tenía la intención de defraudar, ya que en ningún momento se ocultaron los riesgos de una acción como es apostar por un activo digital.
«No hay nada ilegal en tuitear palabras de apoyo o imágenes divertidas sobre una criptomoneda legítima que continúa teniendo una capitalización de mercado de casi 10 mil millones de dólares».» Podría leerse en la respuesta de los abogados de Musk.»
En la respuesta también podía encontrarse una nota a pie de página, hacía referencia a la clase de activo que es Dogecoin. Los abogados rechazaban la afirmación realizada por los inversores que afirmaban que DOGE es un valor, algo que supuestamente a ellos no se les había comunicado.
Dentro de la demanda también se involucra a la Dogecoin Foundation, una organización sin fines de lucro detrás del activo. La entidad también apoya a los abogados de Musk en la desestimación de la demanda.
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