El precio de las criptomonedas aumentó vertiginosamente durante los últimos meses de 2017. Tanto que bitcoin rozó los 20.000 dólares en diciembre de ese año. Esto llevó a muchos inversores no apenas a adquirir criptomonedas, sino que muchos se adentraron en el mundo de la minería de cripto activos.
Sin embargo, 2018 no empezó con la misma suerte que su año precedente. Desde su inicio, el precio de la mayoría de las criptomonedas ha ido disminuyendo progresivamente.
Este descenso en el precio de las criptomonedas parece haber hecho que la minería no sea tan rentable como lo era y ha llevado a una disminución de la demanda de tarjetas gráficas.
La minería ha dejado de ser tan rentable
La caída en la demanda de las tarjetas gráficas, a su vez, ha afectado al precio de las mismas que actualmente están disminuyendo y podrían llegar a reducirse un 20%.
Los mineros parecen haber perdido el interés por las tarjetas gráficas, sin embargo, mientras su demanda cae, el suministro continúa elevado. Por otro lado, el comportamiento de los jugadores también está afectando negativamente. Este grupo tampoco están adquiriendo las tarjetas gráficas que solían adquirir.
Al parecer las empresas necesitan vender las existencias actuales ya que es posible que las Nvidia de próxima generación estén al caer. Estas están basadas en la arquitectura Nvidia Volta y saldrán en algún momento de este año. Además, AMD también anunció que la compañía presentará tarjetas gráficas para juegos basadas en 7nm, aunque tampoco se conoce cuando.
El futuro lanzamiento de estas tarjetas gráficas puede estar haciendo con que los jugadores estén aguardando por ellas en lugar de adquirir las que están actualmente disponibles.
Así que, la opción que les queda a los vendedores es bajar los precios para intentar así vender las existencias actuales antes del lanzamiento de las tarjetas gráficas de próxima generación.