La organización ecologista deja de aceptar donaciones en Bitcoin alegando motivos medioambientales.
Greenpeace es quizá la mayor organización ecologista del mundo. Desde su fundación en 1971 ha ido creciendo ante una mayor concienciación de la sociedad de la necesidad de mantener una actividad mundial más sostenible.
Una de sus principales luchas es la de atajar el cambio climático y las emisiones de carbono.
Es por ello que ahora creen hacer lo correcto al dejar de aceptar donaciones en Bitcoin. Algo que estaban aceptando desde el año 2014.
Aunque se han podido rebatir en numerosas ocasiones los supuestos argumentos en contra de la minería de las criptomonedas. Sigue siendo cierto que el minado de Bitcoin supone un gasto energético muy elevado, que quizá otros sistemas que no sean proof of work, como el proof of stake, podrían evitar. No sin contrapartidas por supuesto.
La organización afirma que el incremento tan elevado de energía que la red de Bitcoin demanda en los últimos tiempos es algo insostenible y que no van a participar en ello. Ya que una de sus principales misiones como organización es la de reducir la huella de carbono que deja el hombre cada día para paliar los efectos del cambio climático.
Lo cierto es que esta organización tan grande y concienciada ha necesitado que un multimillonario como Elon Musk lanzara su famoso tweet a las redes sociales diciendo que Tesla dejaría de aceptar pagos en Bitcoin por motivos medioambientales.
Al rebufo de estas declaraciones se han unido diferentes organizaciones para acusar a Bitcoin de derroche y sin sentido.
Diversos analistas han podido concluir que el uso energético de Bitcoin no supone un impacto superior al de muchos servicos que actualmente damos por correctos y asumibles. El actual sistema bancario con todas sus ramas es muy probablemente un derroche de recursos planetarios mucho mayor. Además no posee las cualidades que las criptomonedas tienen y que otorgan al individuo la libertad total sobre sus tenencias.
Por otro lado se abren muchos debates sobre la posible hipocresía de estos movimientos. Que quizá obedezcan más a movimientos oportunistas y publicitarios sin una verdadera base objetiva.
También se ha analizado cómo la necesidad energética de Bitcoin ha reportado el desarrollo de nuevas formas de suministro sostenible y energías renovables. Abaratando a la larga este tipo de infraestructuras.
Es un tema complejo en el que se deben poner en la balanza los grandes beneficios que aporta la tecnología de cadena de bloques a prueba de trabajo para el individio y si cadenas con menos necesidad de recursos energéticos como Ethereum 2.0 pueden aportar los mismos valores que Bitcoin.
Quizá nuevas soluciones en materia energética eliminen esta traba para la adopción de Bitcoin. Es probable que ya se esté ideando algo por parte de alguna gran empresa con la capacidad suficiente para influenciar la opinión de muchos.
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