FTX está siendo investigado por los reguladores y las autoridades de las Bahamas para descubrir si se ha realizado alguna actividad delictiva, por parte de la plataforma. La casa de intercambio se declara en bancarrota tras una crisis de liquidez descubierta la pasada semana.
La semana pasada la casa de intercambio FTX se desmoronó de la noche a la mañana tras descubrirse un problema de liquidez por parte del exchange. FTX era la segunda casa de intercambio con mayor volumen en todo el ecosistema crypto, pero la mala gestión ocasionó un colapso que ha obligado a la administración a declararse en bancarrota. En un primer momento, Binance firmó una carta de intenciones para adquirir el 100% de la plataforma y así tratar de salvar a sus usuarios, pero este acuerdo finalmente no se llevó después de que Binance reconociese que no sería capaz de solucionar la situación.
Tras descubrirse esta falta de liquidez, FTX sufrió una fuga de usuarios y clientes pasiva, lo que también llevó al desplome de su token, el FTT. En cuestión de días, FTT pasó a valer menos de 1,5 dólares, cuando su precio promedio en los últimos meses estaba entre los 22 y los 25 dólares. FTT conformaba parte de las reservas del exchange, lo que izo que este se viese envuelto en un problema de liquidez todavía mayor. Esta serie de movimientos hizo que FTX acumulase un déficit mayor a los 9.000 millones de dólares.
FTX cuenta con su sede fiscal en las Bahamas y tras lo sucedido se han abierto diferentes investigaciones para verificar si la situación y movimientos de la plataforma estaban dentro de la legalidad. La División de Investigación de Delitos Financieros de las Bahamas junto con el regulador de valores local están investigando si se produjo alguna conducta delictiva por parte de FTX. En un comunicado publicado por el cuerpo de la Policía Real de las Bahamas puede leerse lo siguiente:
«A la luz del colapso de FTX a nivel mundial y las liquidaciones provisionales de FTX Digital Markets Ltd., un equipo de investigadores financieros de la Subdivisión de Investigación de Delitos Financieros está trabajando en estrecha colaboración con la Comisión de Valores de Bahamas para investigar si se produjo alguna mala conducta delictiva.»
Se conoce que los reguladores de las Bahamas llevan vigilando la situación de FTX desde la pasada semana debido a las declaraciones de su propia administración. FTX permitió que algunos clientes no identificas realizasen retiros de fondos de la plataforma, apoyándose en requisitos normativos locales. En ese momento, los retiros de la plataforma ya habían sido limitados debido al colapso de la misma.
Las autoridades han confirmado que en ningún momento permitieron u ordenaron a FTX que restableciese los retiros. Se sospecha que estos retiros pudieron ser realizados por parte de la propia administración para así tratar de salvar algunos activos antes de la quiebra.
Los reguladores y autoridades de las Bahamas no son las únicas fuerzas del orden que están investigando la situación de FTX. La SEC de los Estados Unidos y el Departamento de Justicia del país están investigando a la plataforma.
¿Dónde se encuentra el CEO de FTX?
El paradero de Sam Bankman-Fried, ex CEO también es todo un misterio para la comunidad crypto y el mundo entero en general. Bankman-Fried se ha reconocido como uno de los principales responsables del colapso de FTX, que junto con su equipo administrativo lograron llevar a un negocio multimillonario a la quiebra en cuestión de días.
Desde que FTX se declaró en bancarrota se desconoce donde se encuentra Bankman-Fried. Diferentes fuentes apuntan a que este se encuentra en la Bahamas, pero que no ha sido detenido y sigue en libertad sis restricciones. Otras fuentes afirman que tanto él como dos de sus ex socios están bajo retenidos bajo la supervisión de las autoridades locales.
Las teorías más osadas apuntan a que Bankman-Fried se fugó tras no poder hacerse cargo de la situación del exchange y ahora está en paradero desconocido. Se sospecha que este podría haber escogido Argentina, o uno de los países de Latinoamérica para esconderse.
En el último año, FTX invirtió 74 millones de dólares en la adquisición de propiedades residenciales al rededor de su sede en la Bahamas. Que Bankman-Fried estuviese en alguna de estas, que todavía son propiedad de FTX, es otra de las posibilidades.
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