El 2019 fue un año bastante duro para el ecosistema de las cadenas de bloques. A pesar del largo criptoinvierno, las plataformas de contratos inteligentes han logrado superar los escollos y entrar en el 2020 con resultados positivos.
Varias redes que se apoyan en contratos inteligentes fueron capaces de cumplir con actualizaciones, encontrar nuevos socios comerciales, o retomar el rumbo, luego de haberse enfrentado a un mercado que sufrió verdaderos momentos de desespero durante los doce meses anteriores.
En el ámbito de las finanzas descentralizadas (DeFi), el proyecto liderado por Vitalik Buterin, Ethereum, sigue cobrando creciente protagonismo; la cadena de bloques de Binance, Binance Chain, es otra que no afloja, emulando el ímpetu de su compañía matriz.
Por otro lado, la gente de EOS viene con avances en el área de las redes sociales descentralizadas, y la controvertida Tezos encuentra nuevos caminos. TRON, la cadena del supermediático CEO Justin Sun, es otra iniciativa blockchain que dará sorpresas en el año que comienza.
Contratos inteligentes, la bandera de Ethereum
El equipo encargado de impulsar la red pionera de contratos inteligentes, Ethereum, no cree en las malas rachas. Con lo pesado que se hizo el 2019 para el mundo de las monedas virtuales, Ethereum hizo oídos sordos a los cantos de sirena y siguió adelante con sus actualizaciones programadas.
Hace apenas un mes que la red estrenaba Estambul, una de las mejoras que estaba en agenda. El pasado 2 de enero, era la actualización Glaciar Muir quien entraba en acción, haciendo que el tiempo de creación de bloques en Ethereum disminuya.
No puede estar mejor escogido el nombre para dicha actualización: la idea de Glaciar Muir es “enfriar”, mediante su retraso, el efecto de la bomba de dificultad que reside en la red Ethereum. El algoritmo llamado bomba de dificultad tiene el propósito de hacer que los bloques de Ethereum sean progresivamente más difíciles de extraer.
Antes de lo esperado
La abrupta implementación de Glaciar Muir se debió a un error de cálculo por parte de Ethereum. Se supone que los primero efectos de la bomba de dificultad no se harían notar hasta el tercer trimestre de este año.
Usando su cuenta de Twitter, Tim Beiko, desarrollador perteneciente a la red, hizo saber a finales de noviembre que la bomba de dificultad estaba ya haciéndose notar. Se hacia necesario entonces “enfriarla” de alguna manera. La solución propuesta fue Glaciar Muir.
Debido a que la fecha de la bifurcación Estambul estaba prácticamente encima, fue imposible para el equipo de Ethereum incluir en ella el código de lo que sería luego una actualización en sí. No faltaron voces que criticaran el proceder de Ethereum en esta ocasión.
Ante ello, la Fundación Ethereum se defendió, argumentando que los cambios puntuales como el realizado con Glaciar Muir pueden ser mejor manejables, en caso de encontrarse fallas en la implementación. Esto, comparado con las bifurcaciones duras en toda la línea.
Durante el 2020, la red que fuera conocida por introducir la innovación de los contratos inteligentes, seguirá consolidando su liderazgo en el sector de las Finanzas Descentralizadas. A principio del pasado diciembre, la Fundación Ethereum señaló que los contratos inteligentes de las DeFi acaparan más del 2 por ciento de todas las monedas ETH que circulan actualmente.
EOS: el “asesino” inofensivo
La plataforma de contratos inteligentes EOS fue considerada desde su aparición como “el asesino de Ethereum”. Siendo apenas dos años más joven que dicha blockchain, los planes de EOS no son para nada modestos.
Como muchas otras cadenas de bloques, EOS se ejecutó al principio sobre la red de Buterin. Sin embargo, al comenzar a caminar sobre sus propios pies, EOS comenzó a avanzar rápidamente, pretendiendo, entre otras cosas, convertirse en una plataforma para contratos inteligentes mucho mejor que Ethereum.
Una recaudación como ninguna
Financieramente tiene con qué, pues la ICO de EOS ha sido una de las más grandiosas (y larga) de las que se tenga noticia: recaudó unos USD 4,2 mil millones. Lastimosamente, la disponibilidad de fondos no ha sido suficiente para librarla de ciertos asuntos.
El año que recién terminó, la plataforma tuvo que hacer frente a problemas legales con la SEC, que terminaron gracias a un acuerdo extrajudicial que le costó USD 24 millones a Block.One, la compañía que está detrás de EOS.
En poco tiempo, esta red se ha convertido en un jugador importante en la arena de los contratos inteligentes. Allí compite no sólo contra el líder del sector, Ethereum, sino que enfrenta a proyectos notables, nativos del continente asiático, como NEO y TRON.
Tan pronto como el 14 de febrero, EOS tiene programado el lanzamiento beta de “Voice”, una red social descentralizada y “desparasitada”. Tanto el CEO de EOS, Brendan Blumer, como Dan Larimer (CTO) diagnostican que las redes sociales actuales son nada menos que una estafa para los usuarios.
Las cantidades inenarrables de datos coleccionados por las RRSS producen trillones de dólares anualmente a corporaciones, compañías de tecnología y otros, mientras que los usuarios no participan ni siquiera marginalmente de estos beneficios.
La propuesta de Voice es una red social libre de algoritmos manipuladores, de lavados cerebrales, donde el valor verdadero reside en la colaboración de la gente. La recompensa por pertenecer y prestar tu atención a Voice vendrá en forma de tokens Voice.
Sabemos que tratar de conseguir un espacio entre las redes sociales tradicionales en un reto monstruoso, pero EOS dará el primer paso el venidero Día de San Valentín.
Más Dapps, más negocios
¿Se pueden tener cuentas de ahorro en criptomonedas? Con algunas de ellas sí, como ocurre en el caso de Tezos. En realidad, Tezos es una de muchas iniciativas de monedas digitales que funcionan en base al algoritmo de consenso llamado Prueba de Participación Delegada (dPoS).
Los usuarios de dichas redes, al mantener por cierto tiempo almacenadas una cantidad estipulada de monedas digitales, reciben más monedas en proporción a las que ya poseen. El asunto es que la billetera donde guardan sus criptomonedas, o tokens, debe ser compatible con el protocolo de consenso.
Afortunadamente para Tezos, los problemas que entorpecieron sus inicios parecen haber sido superados. En 2019 fueron varias bolsas de monedas virtuales las que implementaron el soporte para el dPoS de XTZ, el token nativo de la red, lo que da un impulso necesario a su adopción.
El incremento en el numero de cuentas de XTZ fue consecuencia inmediata de este hecho. Se estima que los poseedores de las mismas obtendrán un retorno aproximado del 7 por ciento anual sobre sus haberes del token.
Se solicitan programadores
El punto flaco de Tezos, este 2020, parece estar en su comunidad de desarrolladores. Entre las plataformas de contratos inteligentes, Tezos es la que exhibe un menor grupo de programadores, por lo que tendrá que destinar recursos para fortalecer este particular.
La lógica indica que, con un mayor numero de programadores, pueden producirse mayor cantidad de aplicaciones descentralizadas. Esto, a su vez, genera demanda sobre el token XTZ, influyendo positivamente sobre su cotización futura.
Sin contratos inteligentes, por ahora
Cuando se habla sobre bolsas de criptomonedas, no es posible dejar de mencionar a Binance. El alucinante éxito de la plataforma ha sido opacado solamente por el incidente de hacking que protagonizó en mayo de 2019.
Pero Binance no se conforma con ser el intercambio mas grande del planeta. Quiere evolucionar, y en abril del año pasado lanzó Binance Chain, una cadena de bloques propia, y Binance DEX, su intercambio descentralizado.
Tan pronto se inauguró la nueva cadena de bloques, comenzaron a llamarla, como en el caso de EOS, “el nuevo asesino de Ethereum”. No en lo relativo al desarrollo de contratos inteligentes, por cierto. El token ERC20 con mayor valor dentro del ecosistema Ethereum, BNB, migraría en breve a Binance Chain.
Hacia el nuevo vecindario
Otros proyectos seguirían el movimiento de Binance, llevando sus tokens mantenidos por contratos inteligentes de Ethereum, u otras cadenas, al entorno de Binance Chain. Algunos comenzarían a crear los suyos en la nueva plataforma. Así hicieron compañías como Aeron, Blockmason, ChangeNow, Gifto, Fantom, Harmony, Ankr, Mithril, Red Pulse, Stably, TrueUSD y Travala.
El cambio de cadena para muchos proyectos fue un hecho, pasando del estándar ERC20 al BEP2 (Binance Chain Evolution Proposal 2).
En cuanto a ser competidor de Ethereum, Chanpeng Zhao dejó claro que Binance Chain no fue creada con el propósito de ser rival de esa red. Refiriéndose particularmente a su flamante bolsa descentralizada Binance DEX, dijo que no existen contratos inteligentes en ella (todavía), y que el reto existe para los demás intercambios, incluyendo el Binance original.
Popularidad a pulso
Posiblemente, aparte de Ethereum, Tron sea una de las redes de contratos inteligentes con mayor cobertura por los medios. Gracias a la constante labor de evangelización que incansablemente realiza su CEO, Justin Sun, la cadena de bloques Tron es casi una vedette en el ecosistema de las criptomonedas.
Durante el 2019, la blockchain de Sun no hizo más que consolidarse como una de las mejores alternativas para el desarrollo y hospedaje de Dapps, efectuando alianzas provechosas con diversas empresas.
Entre ellas, se encuentra la firma de inversiones digitales Swarm, mediante la cual los residentes de Tron tendrán acceso a STOs de forma transparente. También, la compañía de entretenimiento MixMarvel, fabricante de juegos blockchain, se convirtió en otro de los compañeros de negocios de Tron.
Por las múltiples ventajas que ofrece, esta cadena de bloques se ha convertido en un polo atrayente para diversos proyectos, como DLive, por ejemplo. DLive es una iniciativa blockchain para video streaming, y cuenta con una de las megaestrellas del universo de los videos en línea, el youtuber PewDiePie.
Contratos para el futuro
La principal ventaja de los contratos inteligentes es su capacidad de efectuar transferencias de valor entre partes sin confianza. Los contratos inteligentes se deshacen del intermediario, permitiendo a actores, que no se conocen, establecer acuerdos de cumplimiento automático.
Esta característica los convierte en la pieza capital de las finanzas descentralizadas, un sector del ecosistema blockchain que viene creciendo con fuerza.
Ciertamente, los contratos inteligentes constituyen una de las innovaciones más prometedoras en el mundo de la tecnología. No los vemos en funcionamiento mediante contacto directo, sino tras las cortinas de las aplicaciones blockchain de reciente generación.
La combinación entre la tecnología blockchain y estas piezas de código ya está impactando notoriamente las cadenas de suministros de importantes marcas mundiales. Su influencia en otros aspectos del quehacer empresarial se hará evidente con el correr de los años.
