Tras un larga investigación, las autoridades italianas han relacionado a Francesco Firano, fundador del exchange, con el ataque sucedido en el 2018. El CEO sustrajo cientos de Bitcoin poco antes de alertar a las autoridades de que su plataforma había sido atacada por hackers externos.
El pasado 21 de diciembre la unidad de delitos cibernéticos de la Policía Estatal italiana, Policía Postal, emitió un informe acerca de lo sucedido en 2018 con el exchange Bitgrail. Recordamos que en el 2018 Bitgrail sufrió de los ataque más voluminosos de la historia de Italia, dirigido a un exchange.
Los atacantes consiguieron hacerse con 17 millones de tokens Raiblock, actualmente conocido como Nano, y que en su momento supusieron un robo de 150 millones de dólares. El robo fue posible gracias a un fallo de seguridad en el mismo activo que permitió a los hackers realizar retiros ilícitos de la moneda. Este ataque fue denunciado por Francesco Firano, CEO y fundador del primer exchange italiano, Bitgrail.
Tras el ataque, las autoridades italianas comenzaron a trabajar en el caso, para tratar de rastrear los activos que se habían sustraído. Sin embargo, la investigación se enfocó en el propio denunciante, el señor Firano. Pocos meses antes, el Tribunal de Quiebras de Italia, condenó al sujeto a devolver la mayoría de los activos a sus clientes debido a una incautación de más de 1 millón de dólares en criptomonedas al mismo Firiano.
Los antecedentes del fundador fueron suficientes para abrir una investigación directa en su contra, la cual nos remonta hasta la actualidad. Según el informe publicado por las autoridades italianas, Firiano conocía que se estaban realizando operaciones fraudulentas mucho antes de denunciarlo. Aún a sabiendas de que la plataforma suponía un gran riesgo para los usuarios, el fundador decidió ocultarlo y seguir operando durante varios meses.
En ese lapso, la cantidad de los usuarios de la plataforma aumento hasta los 217.000, a causa de ser el primer exchange italiano. Durante este tiempo tampoco se informó al equipo de Nano para tratar de buscar una solución conjunta.
A mayores de ocultar la brecha de seguridad en su plataforma, también se ha descubierto que Firiano sustrajo 230 BTC de los fondos de los clientes. Estos fondos suponían en su momento unos 1,9 millones de dólares, en la actualidad serían unos 5,2 millones de dólares. Los activos fueron sustraídos justo 3 días antes de comunicar a las autoridades el robo en Bitgrail.
El cuerpo de policía italiano puedo rastrear la operación la cual llevaba los activos sustraídos hasta una compañía conocida como The Rock Trading con sede en Malta y propiedad de Firiano. Desde que se traspasaron los fondos, se ha intentado pasar a fiat una parte de los activos, sin embargo, actualmente la mayoría de los fondos siguen en la dirección de la compañía. Eso quiere decir que estos fondos se han revalorizado y por lo tanto dando más ganancias al autor de la operación.
Firiano, en un intento por lavar su nombre, se puso en contacto con la la cadena Nano para tratar de modificar el libro mayor de la misma. Sin embargo, esto no fue posible ya que las operaciones fraudulentas provenían de meses atrás y ya estaban albergadas en la cadena.
Actualmente, Firiano sigue libre y reivindicando su inocencia a través de Twitter.
La única restricción que se la ha impuesto a Firiano, hasta el momento, es la de no ocupar puestos gerenciales o realizar actividades comerciales. Por otro lado, los autores del ataque a través de Nano siguen sin ser identificados y por lo tanto en libertad.
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