Starbucks, una de las cafeterías más importantes del mundo, al parecer no aceptará monedas virtuales como se había sugerido. El pasado 3 de agosto, el Intercontinental Exchange (ICE) anunció que se encontraba en estrecha colaboración junto a Microsoft y Starbucks para implementar las aplicaciones ventajosas de las monedas virtuales.
Starbucks, falsas esperanzas
Los entusiastas de las criptomonedas, y asiduos visitantes de la famosa cadena mundial de cafeterías, comenzaron a interpretar el anuncio como que Starbucks comenzaría a aceptar inmediatamente Bitcoin como medio de pago para poder tomar su café favorito a cargo de sus criptos. Pero la verdad es que Starbucks no está lista, y, si lo estará, no se tienen indicios de para cuándo. Si alguno de los criptofanáticos amantes de la cafeína quisiera desenfundar su billetera electrónica para cubrir su consumo en una de las tiendas de Starbucks, tendría primero que salir de ellas, cambiándolas por dólares americanos antes de efectuar el pago.
Relacionado con el anuncio de la semana pasada, la Vicepresidenta de Alianzas y Pagos de Starbucks, María Smith, declaró en ese entonces lo siguiente:
«Como minorista principal, Starbucks jugará un papel fundamental en el desarrollo de aplicaciones prácticas, confiables y reguladas para que los consumidores conviertan sus activos digitales en dólares estadounidenses para su uso en Starbucks», dando a entender que, en efecto, los clientes podrían en, algún momento, comenzar a utilizar sus fondos de monedas virtuales para pagar consumos en locales de la cadena, no sin antes convertirlos en la moneda de curso legal en el país
Evidentemente, tanto el anuncio de ICE como los comentarios e Smith fueron interpretados con demasiado optimismo, al menos por quienes esperaban acercarse a la tienda de Starbucks más cercana para estrenar el supuesto nuevo método de pago.
«Como líder en Mobile Pay para nuestros más de 15 millones de miembros de Starbucks Rewards, Starbucks está comprometido con la innovación para expandir las opciones de pago para los clientes «, añadió Smith, sugiriendo en la mente de muchos que se refería a incluir pagos de criptomonedas en las tiendas de la famosa cadena de cafeterías.
Intercontinental Exchange (ICE), un operador muy importante de intercambios globales, cámaras de compensación, servicios de datos y listados, ha manifestado su intención de crear una nueva compañía conocida como Bakkt. La firma se apoyará en las soluciones ofrecidas por Microsoft en la nube con el objetivo de crear un ecosistema global abierto y regulado para los nuevos activos digitales.
El sistema Bakkt incluirá mercados regulados federalmente y aplicaciones comerciales y de consumo. El desarrollo de una plataforma de intercambio donde se pueda negociar Bitcoin contra otras monedas fiduciarias será uno de los primeros puntos a atender.
Hasta los momentos, sólo es posible pagar cualquiera de los atractivos ítems del menú de Starbucks con efectivo normal y corriente, con tarjetas o con la popular aplicación móvil de la cadena, que sigue siendo la preferida, antes que las demás apps para pagos electrónico de Apple, Google y Samsung.
Frapuccinos y criptohacking
Starbucks ha ocupado anteriormente titulares de noticias debido a sucesos relacionados con las criptomonedas. A finales del año pasado, Noah Dinkin, jefe de la empresa Stensul y cliente de la cafetería en Buenos Aires, Argentina, descubrió que la red inalámbrica pública del local redirigía a los usuarios a una página de Internet vacía durante 10 segundos, tiempo que aprovechaba el proveedor del servicio para extraer criptomonedas.
Según pudo averiguar Dinkin, se trataba de Monero la moneda extraída, publicando luego una nota en Twitter donde alertaba a Starbucks.
El portavoz de la cadena respondió al tuit confirmando que, efectivamente, la actividad ilegal de minería cripto se había llevado a cabo, diciendo, además, que el caso de criptohacking tuvo lugar solamente en Buenos Aires, culpando por esto a la compañía proveedora de la conexión inalámbrica.
Posteriormente, Starbucks publicó, usando su cuenta oficial de Twitter, que ya habían tomado medidas para garantizar que sus clientes pudieran seguir usando la red del local sin arriesgarse a sufrir este tipo de incidentes.
